Antonio Monterroso, Cordópolis, 28 de febrero de 2023
Filósofos nutridos de sopa de convento contemplan impasibles el amplio firmamento; y si les llega en sueños, como un rumor distante, clamor de mercaderes de muelles de Levante, no acudirán siquiera a preguntar ¿qué pasa? Y ya la guerra ha abierto las puertas de su casa. Castilla miserable, ayer dominadora, envuelta en sus harapos desprecia cuanto ignora.
A orillas del Duero. Antonio Machado.
A orillas del Guadalquivir, “Catedral: Antes muerta que Mezquita”, Harazem scripsit. Este habría sido un titular insuperable. Fue una premonición, hoy más actual que nunca, para desgracia andaluza. No hay ganas de más. Basta decir NO y rememorar ese, rotundo y certero, aun cuando me mediase un abismo con las críticas anticlericales del admirado Manuel.
El proyecto de ampliación del museo diocesano alude a la necesidad de frenar “la reducción cultural tan fuerte” de la ciudad a lo islámico que “eclipsa el brillante pasado visigodo, romano y cristiano”
Visitantes en la Mezquita-catedral de Córdoba / Alejandro Ruesga _______________
La ampliación del museo diocesano con la incorporación de un centro de interpretación de la Mezquita-catedral de Córdoba, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, es un empeño largamente acariciado por la diócesis de la provincia y que, aunque no tiene fecha concreta de inauguración, está muy cerca de convertirse en realidad. La iniciativa, sin embargo, no abandona la ofensiva contra la indiscutible y evidente influencia islámica de todo el conjunto monumental de la que ha hecho bandera en los últimos años su obispo, Demetrio Fernández, tal y como deja constancia el proyecto para reforma del enclave museístico en el Palacio Episcopal al que ha tenido acceso este diario.
La justificación de la reforma advierte claramente de que “la necesidad de rediseñar todo el espacio se deriva de la constatación de que Córdoba se encuentra marcada con una etiqueta cultural muy potente: la de ciudad musulmana. La reducción cultural es tan fuerte que tiene la capacidad de eclipsar el brillante pasado visigodo, romano y cristiano, rico en manifestaciones artísticas y que ha dejado huellas indelebles en la historia y en la cultura actual de la ciudad”.
El deán-presidente, Joaquín Alberto Nieva García, asegura que así lo ha indicado el Ministerio de Cultura hace apenas un mes en un informe oficial, señalando al Cabildo como gestor del monumento.
Nieva García, deán-presidente del Cabildo, en los Desayunos de Diario Córdoba donde ha participado con la conferencia ‘Una mirada hacia el futuro de la Mezquita-Catedral de Córdoba’ / Diario Códoba _____________
El nuevo deán-presidente del Cabildo Catedral de Córdoba, Joaquín Alberto Nieva, ha dado este miércoles por cerrada la polémica generada en los últimos años sobre la titularidad del Conjunto Monumental Mezquita-Catedral de Córdoba, pues el actual Gobierno de la Nación ha reconocido por escrito, “hace un mes”, que “la titularidad es de la Iglesia Católica”, y lo ha hecho el mismo Gobierno que había “promovido el estudio de las inmatriculaciones”.
Así lo ha destacado Nieva al ofrecer la conferencia titulada ‘Una mirada hacia el futuro de la Mezquita-Catedral’ en un encuentro de ‘Los Desayunos de Diario Córdoba’, donde ha explicado que ha sido el Ministerio de Cultura y Deporte el que ha dado “por cerrada” esta cuestión, pues “en el proyecto para la conservación y restauración de la decoración de la Capilla Real”, que “ha presentado hace un mes” al Cabildo, recoge literalmente “titularidad: Iglesia Católica” y “gestión: Cabildo de la Catedral de Córdoba”.
Domingos Laicos en su programa 67 analiza la exposición, inaugurada en Córdoba el 16 de diciembre de 2022, con el título de “Cambio de Era. Córdoba y el Mediterráneo Cristiano”, repartida en tres sedes (VIMCORSA, C3 y la propia Mezquita) y que expone 200 obras de distintos museos y países.
Presentación y comentarios de la exposición han sido criticados por especialistas de arte y otras personas intelectuales de la ciudad por falta de rigor intelectual y exceso de adoctrinamiento, entre otras cosas.
Para hablar de ello Ana Baragaña y José Antonio Naz contaron en Domingos Laicos con Miguel Santiago, apasionado de la Historia y la cultura de Córdoba y Andalucía y autor del recién aparecido libro “Los obispos de la Mezquita” ; y con José María Báez, artista, comisario de numerosas exposiciones y escritor de libros, siempre ligados a la cultura especialmente de Córdoba.
Inauguración de la exposición ‘Cambio de era. Córdoba y el Mediterráneo cristiano’ en el C3A _________________
José María Báez, Cordópolis, 21 de diciembre de 2022
Al comenzar el recorrido de la exposición Cambio de era. Córdoba y el Mediterráneo Cristiano por la Sala de exposiciones Vimcorsa, el texto introductorio nos indica que “el nacimiento de Jesús se considera en gran parte del mundo occidental como el evento que dio inicio a una nueva Era”. Desconocemos a que gran parte del mundo se alude, pero la realidad es que la figura de Jesús, y su ideología religiosa, sólo tuvo entidad y presencia en el mundo occidental 312 años tras su nacimiento, y con ocasión de la imposición como religión única por parte de Constantino en todo el imperio romano.
Antes de esa fecha, el cristianismo no significó gran cosa para el mundo. Sólo los griegos Celso (en torno al año 170 d.C.) y el filósofo Porfirio (algunas décadas después), se detuvieron a analizar en profundidad y ridiculizar la “extravagancia” que suponía esa nueva religión, cuyos adeptos optaban por la ignorancia (no inquieras, sino cree, pues la fe te salvará, predicaba), la delación y el exterminio de los creyentes de otras religiones (informadme de todos los pecadores y los castigaré como merecen, apremiaba san Juan Crisóstomo) y la muerte (antesala del gozo del paraíso), ante la perplejidad que estas cosas causaban a los escasamente dogmáticos romanos.
Mezquita de Córdoba / Wikimedia Commons _________________
Miguel Santiago, Paradigma, 17 de diciembre de 2022
Con estas palabras se despachó sin ningún tipo de sonrojo el actual obispo de Córdoba para referirse a la Mezquita. Los últimos relatos acuñados por el Cabildo catedral y el Obispado pretenden hacer ver que la Mezquita de Córdoba fue un simple paréntesis en la historia de la Catedral, anterior a la construcción islámica y volviendo a su estado original a partir de la conquista castellana.
La Jerarquía católica minusvalora el monumento arquitectónico más importante del islam occidental, uno de los principales referentes del Paradigma Córdoba y Patrimonio de la Humanidad, tergiversando la historia, haciendo creer que al-Ándalus fue un simple paréntesis histórico, siguiendo las tesis de la ideología nacionalcatólica, que habla de reconquistas, repoblaciones, inquisiciones, de una única nación verdadera abrazada a la cruz. El nacionalcatolicismo, como una ideología rigorista, ultracatólica y excluyente, ha tenido y tiene el firme propósito de diluir la verdadera historia andalusí, adaptándola a los intereses religiosos e ideológicos por encima de criterios científicos y hermenéuticos. Que en la Mezquita esté la Catedral es una realidad histórica incuestionable, lo que no implica que el Obispado y Cabildo catedral de Córdoba pretendan con estas falsas argumentaciones ser los propietarios y gestores del universal monumento.
La pasada semana no daba crédito. Caminaba y solo veía guirnaldas, miles de guirnaldas blancas. No llegaba a comprender qué significaba eso de la Coronación de la Virgen. Hasta donde sé las vírgenes tienen corona. Naturalmente sé qué es la Navidad y la Semana Santa, pero lo de Emperatriz Reina Coronada, de verdad que no me entra.
Pero yo sólo veía guirnaldas. Las dejaba atrás en mi trayecto y no podía dejar de pensar en ese trabajo colaborativo. Imaginaba cientos de personas dedicando su tiempo a hacer esos floripondios: escolares de los colegios concertados en sus horas de “trabajos manuales”, señoras en sus casas… y vi con mis propios ojos a decenas de jóvenes tirando cables de una calle a otra, tarde y noche, poniendo esas guirnaldas infinitas.
Y no dejaba de darle vueltas. ¿Para qué ha servido ese trabajo? ¿Ha mejorado la vida de alguien? Quizás la de los propios actores que creen haberse ganado un trocito más de cielo. Bien por ellos.
Aristóteles Moreno, Cadena SER, 25 de octubre de 2022
Hay un principio de la termodinámica que certifica que cuanto más se seculariza la sociedad más procesiones salen a la calle cada semana. No me pregunten qué tipo de razonamiento lógico se esconde tras este fenómeno físico. No tengo la menor idea. Pero es un hecho empírico que se hace carne todos los meses del año y fiestas de guardar.
Las encuestas del CIS aseguran que el 40% de los españoles y las españolas ya no creen en supersticiones ni en religiones de ninguna clase. Lo que no dice el CIS, pero se lo digo yo, es que no hay semana en que una Virgen o un Cristo, de penitencia o de gloria, no se pasee por la calles de Córdoba con su banda de cornetas y sus cortes de la vía pública.
La Iglesia católica se aferra a las cofradías en la misma proporción en que los templos se van quedando vacíos. Es otro prodigio de la termodinámica que conviene observar con interés. No tenemos nada en contra de las procesiones. Tienen todo el derecho a ocupar el espacio urbano como cualquier hijo de vecino. Pero con moderación y amor al prójimo, que son dos virtudes cristianas que no deben perderse.
Miguel Santiago presentó su libro sobre ‘Los obispos de la Mezquita’ en la Universidad de Córdoba. “Hemos tenido obispos que han maltratado a la Mezquita de Córdoba, incluso borrando su nombre”
En la mesa, de izda. a dcha., Miguel Santiago, Marta Jiménez y Juan José Tamayo
La Sala Mudéjar de la Universidad de Córdoba, lugar inicialmente previsto para la presentación, se ha quedado pequeña este pasado lunes para la presentación del libro Los obispos de la Mezquita, de Miguel Santiago. La institución académica trasladó el acto al salón de actos, ante una rebosante Sala Mudéjar en la que el público se salía por las escaleras.
El acto ha contado con la participación, además del propio autor; del rector, Manuel Torralbo Rodríguez, como único cargo institucional, el teólogo y prologuista del libro, Juan José Tamayo y Goval, autor de las ilustraciones. El acto, conducido por la periodista Marta Jiménez, ha concluido con la actuación de músico Samu Moreno que ha interpretado ‘La alegría de la Mezquita”, compuesta por el profesor de la Universidad de Córdoba, Antonio Manuel Rodríguez.
Cientos de personas han acudido a la presentación de un libro que ofrece una visión crítica a la versión oficial sobre la historia del principal monumento de Córdoba, la Mezquita Catedral, un edificio único en el mundo. Santiago, profesor de Biología y Geología ya jubilado, es también portavoz de la plataforma Por una Mezquita Catedral de Todos. Cristiano de base, creyente y persona de fe, Santiago ha escrito un libro sobre la historia del monumento y la de sus obispos, “una contradicción en sí misma”, como ha detallado el editor de la publicación y su prologuista, el teólogo Juan José Tamayo.
El colectivo Córdoba Laica ha solicitado al gobierno de la Diputación Provincial de Córdoba que “rescinda” el convenio firmado con el Obispado para la cesión de la iglesia que se encuentra en el Palacio de la Merced para el uso religioso, algo que consideran “contrario a la Constitución española, por ceder una parte importante de su sede al uso de una confesión particular, una situación que es contraria al derecho de libertad religiosa y de igualdad, tanto de quienes trabajan en ese mismo edificio como de la ciudadanía en general, a quien se debe la institución pública y su sede”.
En un comunicado público, Córdoba Laica recuerda que la iglesia es “una dependencia de la sede de la Diputación, estando declarada como Bien de Interés Cultural desde 2008, habiendo sido restaurada con dinero público” y que ha tenido conocimiento de que “el Cabildo cordobés hace uso como ‘parroquia’ de la capilla existente en Diputación Provincial”.
La institución provincial y el Obispado rubricaron en 2020 un convenio para ceder este espacio para el uso religioso en determinadas horas. No obstante, este mes de septiembre ha sido nombrado un nuevo “párroco” de la iglesia, hecho que critica Córdoba Laica por establecer la consideración de parroquia a la iglesia del Palacio de la Merced.