Enrique Ruiz del Rosal, Laicismo.org, 22 de febrreo de 2020
Un año más nos encontramos puntualmente con la campaña propagandística de la Iglesia católica (Ic, en adelante) ante el reiterado intento por mantener la atención mediática de l@s ciudadan@s (en abril será la campaña “Por tantos” y en junio la Memoria de actividades), en relación con la declaración de voluntad de l@s declarantes del IRPF de 2018 (declarado en 2019), para que el Estado (tod@s l@s contribuyentes) subvencione sus actividades de culto y clero (véase la web de Europa Laica y la página Laicismo.org).
1.- Sigue causando estupor y vergüenza que no se hagan públicas previamente por la Agencia Tributaria las escasas cifras que sí obran en poder de la Corporación católica: es a la Administración Pública, puesto que de dinero público se trata, a la que correspondería ofrecer dicha información, dado que la Ic es beneficiaria de esta cuantiosa subvención pública: 284,4 M € . ¿Por qué esta información no es de conocimiento público con anterioridad? ¿A qué obedece este privilegio?
2.- Es indudable que la subvención que recibe la Ic por este concepto, sale de los Presupuestos Generales del Estado, como no podría ser de otra forma. Así lo reconoce el propio Tribunal de Cuentas en su informe provisional sobre las ayudas recibidas por la Iglesia. Si como dice la propaganda episcopal, el contribuyente que marca la “X” ni tiene que pagar más ni se le devuelve menos ¿de dónde otro sitio puede salir que no sea de los Presupuestos del Estado, es decir del bolsillo de todos los ciudadanos? Los impuestos “no pertenecen” al ciudadano, sino al Estado, para proporcionar (supuestamente) servicios de interés general. Por tanto, en realidad, todo es gasto presupuestario. Cuestión distinta es que el Estado no lo consigne en su presupuesto por una argucia de “ingeniería presupuestaria”. ¿Por qué se oculta dicha subvención en los Presupuestos Generales del Estado? Read the rest of this entry »