La polémica norma, adoptada en la Asamblea Nacional, refuerza el control de las mezquitas y penaliza el odio en internet

El primer ministro francés, Jean Castex, en el centro, ayer durante la sesión de la Asamblea Nacional, en París.ANNE-CHRISTINE POUJOULAT / AFP
Marc Basset, El País, 17 de febrero de 2021
Es la ley más ambiciosa y polémica del último tramo de la presidencia de Emmanuel Macron, un proyecto para combatir lo que el presidente francés ha llamado “el separatismo islamista”. La Asamblea Nacional adoptó ayer un texto que intenta poner al día el modelo laico, garante de la libertad de culto y al mismo tiempo la neutralidad del Estado ante las religiones. La decapitación de un profesor de instituto a manos de un islamista y las críticas internacionales a Macron por su estrategia contra el islamismo han marcado una discusión que afecta al núcleo de la identidad política de Francia: la laicidad.
El “proyecto de ley que reafirma los principios republicanos” —este es finalmente el nombre completo, que no menciona el islamismo— modifica algunas leyes fundamentales en la Francia moderna, como la de 1882 sobre la libertad de enseñanza o la de 1905 sobre la separación de las Iglesias y el Estado.
El texto se aprobó con 347 votos a favor, 151 en contra y 65 abstenciones. Votaron a favor los diputados de La República en marcha, el partido de Macron, además de los de varias pequeñas formaciones que le apoyan. El primer partido de oposición, la derecha tradicional de Los Republicanos, votó en contra, así como La Francia Insumisa, el partido de la izquierda populista. Se abstuvieron el Partido Socialista y los seis diputados de la extrema derecha del Reagrupamiento Nacional, partido que carece de grupo propio en la Asamblea Nacional, pero que aspira a gobernar Francia tras las elecciones presidenciales de 2022 y que ocupa un lugar central en todas las discusiones sobre identidad nacional e islam. Read the rest of this entry »