En un año en que el coronavirus ha obligado a suspender la romería de el Rocío, puede ser oportuno recuperar y revisar el documental que sobre el fenómeno del Rocío en Andalucía fue dirigido por Fernando Ruiz Vergara en 1980 y que tuvo “el honor” de ser la primera película secuestrada por un juez en democracia. Versión íntegra.

1 de junio de 2020
Cada año, los habitantes de Almonte, en Huelva, y seguidores de la virgen vuelven a saltar la valla del Rocío para sacar la estatua en procesión. Este año el coronavirus ha obligado a suspender la romería ; puede ser buen momento para revisar y recordar el documental que tiene “el privilegio” de ser la primera película prohibida en nuestro país una vez eliminada la censura: Rocío
Rocío, dirigida por Fernando Ruiz Vergara con guión de Ana Vila, fue rodada entre 1976 y 1978 y estrenada en 1980. Seleccionado por el Ministerio de Cultura para el Festival Internacional de Cine de Venecia de 1981, se alzó con el premio en el Certamen de Cine Andaluz (el único a concurso) de la primera edición del Festival de Cine de Sevilla, en 1980, en la categoría de 35 mm.
El triunfo en el festival de Sevilla permitió que se estrenara en Madrid en 1981, pero pronto encontró serios problemas de exhibición ante las presiones de poderes eclesiásticos y conservadores.
El documental interpretado, como recogía el cartel, “por hombres, mujeres y niños del pueblo andaluz”, es un intento de explicar la romería desde un punto de vista social, histórico y antropológico, por lo que recurre a las opiniones de expertos, algún sacerdote, miembros relevantes de las hermandades rocieras y vecinos de Almonte, como una mujer que narra en primera persona un milagro de la Virgen: la curación de un sarcoma.
Contiene, claro, imágenes de gran potencia visual, muchas tan osadas que hoy serían imposible grabar, como la cercanía de las camareras con la Virgen (“Eres guapísima, eres encantadora, eres la reina almonteña”, le susurra una de ellas) o la descripción que el catedrático José Hernández Díaz realiza sobre la mutilación de imágenes sagradas para adaptarlas al culto o al gusto de la feligresía. Fernando Ruiz Vergara ilustró este hecho con el desmontaje en un convento sevillano de una talla muy modificada de la Virgen de la Merced.
Sin embargo, ni una ni otra propuesta provocó el enorme revuelo que acabó con el secuestro de la cinta y con su director condenado a dos meses y un día de prisión, 50.000 pesetas de multa y una indemnización de diez millones de pesetas. Lo que motivó el escándalo fue sacar a luz la represión en Almonte tras el golpe militar de 1936, desde sus instigadores al centenar de víctimas, recordadas algunas con nombres y apodos por el actor José Luis Gómez, que puso la voz en off a la película. “Un total de cien personas, noventa y nueve hombres y una mujer”, dice. En concreto, en un momento de la película, el realizador incluye las declaraciones de un vecino de Almonte, Pedro Gómez Clavijo, quien cuenta a cámara cómo se urdió la represión. Como sostiene el historiador Francisco Espinosa, “Ruiz Vergara vino a contar la trastienda de la matanza realizada por los fascistas, y puso nombre y rostro al que, según algunos testimonios, aparecía como máximo responsable: el terrateniente y ex alcalde José María Reales Carrasco”.
Por ello, los hijos del mencionado alcalde interpusieron una denuncia (el 23 de febrero de 1981 -horas antes del intentona de Tejero-) por injurias graves así como por escarnio a la religión católica y ultraje que supuso no solo la condena a su director sino también el secuestro del documental en toda España así como la imposibilidad de exhibirse si se mantenían esas escenas. La condena no fue por el escarnio a la religión católica (“los temas religiosos están tratados con respeto”, se afirma textualmente en la sentencia), sino por considerar injurioso lo que en el documental se relata, la represión que durante la Guerra Civil llevaron a cabo una banda de falangistas, en el que se llega incluso a acusar con nombre y apellidos a uno de los cabecillas de los crímenes, el que fuera alcalde de la localidad, José María Reales Carrasco.
El documental volvió a las pantallas en 1985 pero sustituyendo los fragmentos suprimidos por una pantalla en negro con la leyenda «Supresión por sentencia de la Sala Segunda del Tribunal Supremo del 3.4.1984». En su pase por televisión, (en TVE y Canal Sur durante la década de 1990), por decisión del distribuidor, eliminaron incluso los cortes. A día de hoy continúa censurada por la sentencia del Tribunal Supremo en 1984
La persecución judicial de la película supuso el final de la trayectoria del director, que se auto-exilió en Portugal, lugar en el que vivió hasta su fallecimiento en 2011, dio lugar a un documental de José Luis Tirado, “El caso Rocío”, que puede verse íntegro en Youtube
Fuentes:
Wikipedia
¿Por qué ‘Rocío’ es (aún) una película maldita?
El documental sobre el Rocío que fue censurado en democracia
Documental íntegro
Youtube: Fernando Ruiz Vergara desmonta, en el censurado documental “Rocío”, las bases económicas, de clase y de poder que subyacen en la devoción rociera, alienando a toda una comarca. Documento histórico, recuperado por la Asociación Andaluza Memoria Histórica y Justicia, que expone breve pero concisamente la penetración y evolución del catolicismo en España, la razón y lógica de la fe mariana, así como la aparición de las imágenes de vírgenes a lo largo y ancho del país para centrarse en la Virgen del Rocío.
Esta edición corresponde a la publicada junto al libro-documental ‘El Caso Rocío’ (Aconcagua Libros, 2013. ISBN: 978-84-96178-84-7). Las partes originalmente censuradas se muestran en formato reducido con el texto “Fragmento suprimido” (minutos 38:45, 40:45 y 43:30). La única supresión en esta edición es el nombre de José María Reales Carrasco (min. 43:30), terrateniente, fundador de la Hermandad de la Virgen del Rocío de Jerez y alcalde de Almonte durante la dictadura de Primo de Rivera.
Más información:
Maldita Rocío, la película prohibida, la que algunos quisieron ignorar
Otras víctimas de la Transición. Persecución, secuestro y censura del filme Rocío de Fernando Ruiz Vergara