El Ayuntamiento urge su rehabilitación integral y destaca el atractivo de la ubicación, a orillas del río Narcea y como paso del Camino Primitivo. El Principado estudiará cómo incluir el monasterio en la red nacional de alojamientos
Estado del interior del Monasterio de San Salvador de Cornellana. / B. G. H.
13 de noviembre de 2019
El monasterio San Salvador de Cornellana es una joya arquitectónica y cultural del siglo IX. Fundado en el año 1024, se cede en el siglo XII a la orden de Cluny. A partir de entonces pasa a ser uno de los monasterios más importantes del occidente de Asturias. En 1536 el Monasterio pasa a formar parte de la Congregación benedictina de Valladolid y comienza una larga reedificación de todo el complejo empezando por la iglesia para adecuarla a los nuevos usos.
Con la ocupación francesa se inicia un periodo de decadencia y la posterior desamortización de Mendizábal, lo suprime como monasterio y pasa a ser una fábrica de manteca. En 1878 el Obispado compró el edificio de nuevo. y desde entonces ha estado en manos de la parroquia. Desde 1931 está declarado Monumento Nacional.
Durante la Guerra Civil fue utilizado por ambos bandos como cuartel, almacén y prisión. Tras la Guerra, el arquitecto Luis Menéndez Pidal restauró la iglesia, la torre románica y parte del claustro. En 1993, el 30 de diciembre, (Boletín Oficial del Principado de Asturias, BOPA, 26-1-1994), pasa a ser un Bien de Interés Cultural con categoría de Monumento.
El monasterio ha sufrido diversas restauraciones llevadas a cabo por la Consejería de Educación y Cultura, a través de la Dirección General de Patrimonio Cultural. En 2014 el Ayuntamiento de Salas consiguió la cesión del Monasterio de Cornellana, propiedad del Arzobispado de Oviedo, por cincuenta años.
Ahora, como recoge El Comercio, a cinco años para la celebración del primer milenario del monasterio de San Salvador de Cornellana, en Salas, se busca cómo recuperarlo y darle una nueva vida
Cornellana se lanza a por su parador