Los obispos alemanes encargaron un estudio exhaustivo sobre los 3.677 casos de abusos, mientras que los españoles se preguntan: «¿Por qué esa fijación con los sacerdotes?»
Eduardo Lagar, La Nueva España, 8 de octubre de 2018
Uno de los grandes inventos de la Iglesia católica fue franquiciar el servicio. Allá donde uno fuese, en San Pedro del Vaticano o en una parroquia de la Patagonia, encontraba el mismo catálogo de productos y protocolos. Se llama católica porque es universal. Pero ahora, según el portavoz de la Conferencia Episcopal Española (CEE), José María Gil Tamayo, hemos de diferenciar por países, hay que tener cuidado y no «extrapolar» a la Iglesia española los escándalos de pederastia protagonizados por curas del extranjero. No explica Gil Tamayo cuál es la mutación genética o la formación eclesial recibida por los sacerdotes españoles que los hace absolutamente inmunes a esta práctica que antaño se abordaba como debilidad a erradicar muy discretísimamente con un traslado, pero que ahora, y hasta el Papa de Roma lo dice, es un delito como una catedral.
Tamayo se preguntaba la semana pasada: «¿Por qué esa fijación en los sacerdotes?». ¿Será porque los pastores no deberían comportarse como lobos? El portavoz de la CEE pidió «justicia informativa» con una institución donde «hay más bien que mal» y que, además, según añadió, sólo protagoniza el 10% de los casos de violaciones a niños, quedando el otro 90% para los pederastas de las familias, escuelas y vestuarios de clubes deportivos, detalló. Read the rest of this entry »