La represión franquista se hizo patente en barrios obreros de Palma, donde había listas de mujeres “rojas” a las que les rapaban la cabeza, las sacaban a “pasear” por el barrio y les hacían beber aceite de ricino en la antigua Casa del Pueblo de Palma, reconvertida posteriormente en un local de la Falange.

_______________
Esther Ballesteros-Nicolás Ribas, El Diario, 10 de diciembre de 2022
En la España del siglo XX (con la excepción del periodo que empieza con la transición española y épocas más luminosas como la II República) las mujeres fueron sujetos sin derechos políticos. Su papel en lo social estuvo relegado al ámbito familiar: ser buenas hijas primero y buenas madres y esposas después, de acuerdo con los cánones morales del catolicismo sostenidos por la institución que más peso tenía en la vida social: la Iglesia Católica.
“La situación política que se generó en la posguerra (…) se puede considerar el colofón trágico y, a la vez, la prueba irrefutable de la aceleración del tiempo histórico que había causado la propia contienda respecto de las relaciones de género”, describe el doctor en Historia David Ginard en Dona, Guerra Civil i franquisme, un libro en el que, junto a cinco autoras –Anna Aguado, Ángela Cenarro, Carme Molinero, Mary Nash i Susanna Tavera–, analiza el papel de las mujeres durante el periodo republicano desde una perspectiva de género, así como los roles que ejercieron las mujeres antifascistas en la España en guerra y los modelos socioculturales que impuso la Iglesia Católica y la Sección femenina de la Falange con el triunfo de los sublevados y el inicio del régimen franquista.
Read the rest of this entry »