El colectivo recrimina la imagen de la talla que da nombre al centro sanitario y al barrio que se ha colocado tras una remodelación en la segunda planta

Mural de la Virgen Macarena en la segunda planta del hospital sevillano que lleva también el nombre de la imagen religiosa / Autor: Sevilla Laica
Jesús Bastante, Religión Digital, 25 de enero de 2021
Es el hospital de La Macarena, en el barrio sevillano de La Macarena, a pocos metros de la basílica de una de las vírgenes más veneradas de España. Sin embargo, para la asociación Sevilla Laica, el mural con el que se ha decorado la planta primera del centro médico, durante la reforma del mismo, “infringe flagrantemente la aconfesionalidad del Estado establecida en el artículo 16.3 de la Constitución”.
¿Por qué? Porque el mural, de grandes dimensiones, “reproduce distintas iconografías de la cara de la Virgen de Macarena“, apunta la asociación en una carta pública, que han enviado a la dirección del hospital. “”Es una deriva del propio nombre del Hospital, que como muchos edificios públicos educativos y sanitarios, ostenta un nombre inapropiado en un Estado aconfesional”, recalcan desde Sevilla Laica.
El mural, en el que han intervenido Nuria Barrera, Javier Jiménez Sánchez-Dalp, José Ciruelo, José Tomás Pérez Indiano, Irene Dorado Miret, César Ramírez Martínez y Pepillo Gutiérrez Aragón, forma parte de la remodelación del hospital que ha acometido el Servicio Andaluz de Salud de la Junta de Andalucía, “en la que los responsables sanitarios parecen haber optado por poner parquet y decorar las paredes en lugar de mejorar las condiciones de atención a los usuarios y de trabajo para el personal sanitario”, sostiene el polémico comunicado, que ha desatado las iras de hermandades, cofradías… incluso hasta del Ayuntamiento de la capital hispalense.
“La falta de respeto a la aconfesionalidad del Estado —añade el texto— es también una falta de respeto a los usuarios del servicio público de salud, que como ocurre en el conjunto de la sociedad, ostentan distintas confesiones religiosas o ninguna”. “¿Cuándo asumirán los autodenominados ‘partidos constitucionalistas’ que la religión y el servicio público son dos cosas que deben mantenerse estrictamente separadas, la primera en el ámbito privado y la segunda en el público y común?”, han cuestionado desde esta organización.
Por todo ello, “Sevilla Laica reitera su exigencia de que los nombres de los edificios públicos que tengan carácter confesional sean sustituidos por otros de carácter laico”.