
Seminario de Oviedo
En Asturias el Grupo de Inmatriculaciones está trabajando para que los Ayuntamientos asturianos presenten mociones a fin de saber qué bienes tiene la iglesia católica registrados a su nombre. En algunos se han presentado ya (Castrillón, Siero, Corvera, Gijón y Oviedo por ejemplo), y también la Mesa de Peticiones de la Junta General ha admitido a trámite una petición para que solicite al Registro de la Propiedad un listado general y así poder valorar la magnitud de las inmatriculaciones, pero mientras se recaban y se conocen los datos actuales, rescatamos la información elaborada en noviembre de 2015 por Mar Díaz para Asturias Diario
La Iglesia, la mayor inmobiliaria de Asturias
El Arzobispado es propietario de unos 16.000 inmuebles en Asturias. Desde la Catedral y el Seminario Metropolitano de Oviedo, a 3.000 capillas, 950 templos, 800 casas rectorales, cementerios, fincas y hasta pequeñas huertas. La venta y alquiler de sus bienes, le reporta unos ingresos de 318.000 euros al año (según los presupuestos de 2014, y 2015, que alcanzan los 11,5 millones). Solo en el concejo de Oviedo, hay 51 parroquias y cientos de inmuebles escriturados a nombre del Arzobispado. El Ayuntamiento quiere que la Iglesia empiece a pagar el IBI de los inmuebles que no están dedicados al culto o a ‘actividades pastorales’. Pero el alcalde, Wenceslao López, reconoce que no disponen de ningún registro, y el Arzobispado no parece dispuesto a colaborar. La Iglesia se aferra a una sentencia del Tribunal Constitucional de 2013, donde se la considera exenta del IBI al tratarse de una ‘organización sin ánimo de lucro’, pero el Ayuntamiento ha cambiado el epígrafe del IBI para aclarar que “los bienes inmuebles propiedad de confesiones religiosas que no estén destinados al culto o a labores sociales o asistenciales desarrolladas por aquellas, no se considerarán exentos del impuesto”. Aún así, la normativa local siempre estará por debajo de la doctrina del Tribunal Constitucional. Avilés, Mieres y Pola de Lena ya intentaron ‘cargar’ el recibo del IBI a la Iglesia, e incluso consiguieron un listado de sus propiedades. Pero el cobro del tributo chocó con la Iglesia y sus privilegios municipales. El ‘diezmo’ del IBI fue paralizado por el Principado que alegó que vulneraba la ley de Haciendas Locales y la ley de Mecenazgo de 2002, que también protege a la Iglesia. Además, los Acuerdos firmados en 1979, por el Estado español y el Vaticano blindan’ a los Arzobispados en cuestiones de tributos.
El Ayuntamiento de Oviedo tampoco tiene una estimación de lo que tendría que pagar, llegado el caso, la Iglesia asturiana en concepto de IBI. En 2013, la Conferencia Episcopal anunció que el pago del IBI, a nivel nacional, supondría un desembolso anual cercano a los 100 millones. Un año antes, el entonces líder del PSOE de Madrid, Tomás Gómez, disparó la cifra hasta los 3.000 millones. Con cientos de pisos e inmuebles, la factura en Oviedo supondría, al menos, unos 100.000 euros.
El patrimonio de la Iglesia
El Arzobispado no solo es el propietario de las parroquias y las casas sacerdotales, en Mieres descontando capillas, colegios y residencias, la Iglesia tiene 157 inmuebles, según un informe municipal. En Gijón, esa cifra podría multiplicarse por diez, y en Oviedo, se dispararía. Cuando la parroquia de San Melchor de Quirós se trasladó desde Vallobín a un nuevo templo en La Florida dejó libre su antigua sede, un bajo en la calle Antonio Maura. Es uno de los inmuebles que no encajan en las exenciones y, por tanto, estaría sujeto al cobro del IBI. Y lo mismo ocurre con la parroquia de Nuestra Señora de la Merced de Ciudad Naranco, que hasta 2008 ocupó un local en la calle Torrecerredo, antes de reabrir sus puertas en el Colegio Loyola. Además, a sus bienes, hay que sumar todos los pisos y fincas legados a la Iglesia en los testamentos de los fieles, que después la ‘organización sin ánimo de lucro’ alquila, como reconoció hace un año el arzobispo Jesús Sanz Montes, cuando anunció la cesión de una decena de viviendas rectorales vacías a familias desahuciadas, a través de Cáritas. Plazas de garaje en la calle Corrada del Obispo, una casa con patio en la calle San José, y fincas en el Naranco, forman parte del ‘gigantesco’ patrimonio inmobiliario que la Iglesia tiene en Oviedo. Hay bloques enteros, como la Casa Provincial y el Colegio Mayor Santo Tomás, en la calle González Besada (5 pisos, más la plata baja). El Arzobispado tampoco paga el IBI por el solar del Martillo de Santa Ana (641 metros cuadrados), que actualmente tiene cedido al Ayuntamiento. En otros casos, es el propio consistorio quien paga al Arzobispado por el alquiler de una de sus propiedades. El centro social del barrio Guillén Lafuerza está en un bajo propiedad de la Iglesia. Y el alquiler (revisado el año pasado y ampliado hasta 2016), supone un desembolso mensual de 4.082 euros al año, con cargo a las arcas municipales.
200.000 euros al año por el Seminario
El Seminario Metropolitano de Oviedo es el mayor edificio que el Arzobispado tiene en Asturias, con más de 20.000 metros cuadrados. La caída en el número de vocaciones vació el inmueble, y la Iglesia le buscó rentabilidad, alquilando parte de sus instalaciones. El arrendamiento de los estudios de radio de la Cope, la Escuela Privada de Magisterio Enrique Ossó, y la academia de MIR, entre otros alquileres, le reportan a la Iglesia unos 200.000 euros al año. Y su último ‘cliente’ es el propio Ayuntamiento, que desde julio tiene alquilados en el Seminario 600 metros cuadrados, destinados al Albergue de Peregrinos. El Arzobispado actúa como ‘casero’, y como cualquier propietario, tendría que pagar el correspondiente IBI. Pero la ley, por ahora, está de su parte, aunque el Ayuntamiento se aferra a algunas sentencias en Primera Instancia (todas recurridas), interpuestas por municipios gallegos para cargar a la Iglesia el recibo de la ‘contribución’ por sus pisos y locales.