Una de las propiedades vendidas, la única tasada aunque la venta incluye parroquia y terrenos colindantes, es una residencia de mayores: 163 ancianos en el limbo…, deberán abandonar las instalaciones antes del 15 de noviembre de 2021.

La parroquia de San Jorge y parte de la residencia de mayores de la fundación Santísima Virgen y San Celedonio / Kike Para
Manuel Viejo, El País, 22 de diciembre de 2019
Más sombras sobre otra operación urbanística eclesiástica. La parroquia de San Jorge y el complejo residencial de la fundación Santísima Virgen y San Celedonio, ubicados en la calle Padre Damián, 22, de Madrid, a solo cinco minutos a pie del Santiago Bernabéu, se vendieron a la Universidad Nebrija por 37 millones de euros el 15 de noviembre de 2018, tal y como desveló EL PAÍS hace un mes. Sin embargo, el informe de la tasación entra en varias contradicciones: fija el precio del metro cuadrado en 2.679,64 euros, cuando asesores inmobiliarios consultados lo establecen en cerca de 5.000 euros por esa zona. Y lo que es más importante: establece una primera superficie en venta de 16.089 metros cuadrados cuando la superficie real vendida es de 29.750 metros. El resultado es que el valor de lo vendido por la Iglesia es de más de 150 millones de euros por unos inmuebles que se han entregado en 37.
Antes de realizar esta compraventa, el gerente de la fundación, Antonio Naranjo Fabián y David López Royo, delegado de fundaciones de la Iglesia -nombrado por el arzobispo de Madrid, Carlos Osoro- encargaron un informe a la consultora Gesvalt para que realizara una tasación a estos bienes. El certificado fijó el importe en 27.085.830,18 euros. La Nebrija, sin embargo, ofreció 10 millones más. Pero en dicho informe, al que se aferran para justificar la venta y al que ha tenido acceso este periódico, solo se ha tasado la residencia de ancianos, el bien dotacional de la fundación. Nada más. Aun así, la Iglesia, que tutela esta fundación, incluyó en la venta la emblemática parroquia de San Jorge y varios terrenos con los que colinda. Read the rest of this entry »