La inmatriculación por la Iglesia de los bienes del arte prerrománico asturiano, tal como ha revelado ‘Público’, vuelve a poner sobre la mesa el debate sobre la propiedad del patrimonio histórico español. Tres juristas, dos medievalistas y un ex ministro de Cultura examinan aquí una cuestión trascendental para el enorme tesoro arquitectónico y artístico privatizado de facto por el Vaticano.
A. Moreno, Público, 12 de abril de 2020
Todo indica que la práctica totalidad del legado cultural de este país ya no pertenece a sus ciudadanos sino que ha sido «privatizado» de forma masiva en virtud de un subterfugio jurídico que muchos especialistas juzgan «arbitrario» e «inconstitucional». La propia Iglesia católica reconoce en su web que nada menos que 3.111 bienes de incalculable valor histórico, entre ellos los monumentos más emblemáticos, figuran ya a su nombre en el registro de la propiedad privada. Ese volumen podría representar más del 80% del patrimonio cultural de España, lo que supone una descapitalización artística sin precedentes.
La jerarquía católica se atribuye la titularidad de todos esos bienes en razón de su uso religioso inmemorial, pero muchos juristas e historiadores sostienen que el mero culto católico no comporta, en modo alguno, un certificado automático de propiedad. La razón que arguyen parte, en cierto modo, del derecho romano, que conceptuaba los templos como res sacrae y, por tanto, bienes fuera del comercio al objeto de preservar su carácter comunitario y de uso general.
Público ha consultado a tres juristas, dos medievalistas y un ex ministro de Cultura para conocer su opinión sobre lo que, si nadie lo remedia, es ya de facto la privatización del patrimonio histórico de España.
«La Iglesia católica no tiene títulos de propiedad que justifiquen el carácter privativo de esos bienes»