José Luis Iglesias, presidente de Asturias Laica, reflexiona sobre la presencia de las autoridades públicas en actos religiosos católico

8 de septiembre, misa en Covadonga: Presidente del Principado y otras autoridades. Foto de Pablo Lorenzana. El Comercio
Artículo de José Luis Iglesias, presidente de Asturias Laica, publicado en La Voz de Asturias, 6/12/2016
Como presidente de Asturias Laica y estando en formación la Red de Municipios por un Estado laico tengo últimamente reuniones diversas con alcaldes, alcaldesas, concejales y concejalas para discutir compromisos y decisiones al respecto.
Sobre la presencia o no de autoridades municipales en actos de carácter religioso me ha sorprendido el argumento de algunos de ellos y ellas, que en coincidencia con lo que viene defendiendo la derecha en algunos ayuntamientos, plantean: ¿Y si te invitan?
Pero las cosas no son así. La realidad no es así. Lo que existe en la realidad social es una desigualdad manifiesta. La iglesia católica en España goza de inmensos privilegios económicos, jurídicos y fiscales de los que no goza ninguna otra asociación privada. Las relaciones entre las autoridades públicas y la iglesia católica no es equivalente al trato que mantienen con las demás entidades. ¿A qué otra asociación privada se le permite no pagar impuestos? ¿A qué otra asociación privada se le permite tener sus representantes en los centros escolares enseñando sus doctrinas? ¿A qué otra asociación privada se le permite realizar en sus locales ceremonias matrimoniales que tengan validez jurídica? ¿ A qué otra asociación privada se le permite tener representantes en el ejército pagados por el ministerio de defensa? ¿A qué otra asociación privada se le permite tener representantes en los hospitales públicos pagados por la nómina del hospital? ¿A qué otra asociación privada se le ha permitido inmatricular a su nombre cientos de bienes inmuebles de carácter público? Y mucho más.