Frente a la adquisición de conocimientos de «forma sencilla y divertida» en Religión católica, el estudio de «muchos temas variados y arduos» en la asignatura de Valores Éticos
Una madre difundía ayer en Facebook, confesando estar «alucinada», la información sobre asignaturas optativas que el Departamento de Orientación de un centro público entregaba a las familias como anexo al impreso de matrícula para segundo de la ESO. Hoy InfoLibre se hace eco y publica la noticia con este titular:
Un instituto de Asturias presenta la Religión en su oferta de matrícula como una asignatura “divertida” frente al “esfuerzo” de cursar Ética
Javier Martínez, 29 de julio de 2016
- El IES de Salinas informa a alumnos y familias de que Religión es una asignatura «sencilla y divertida» mientras que su alternativa, Valores Éticos, requiere «un esfuerzo considerable» ya que consta de «temas dificultosos (…) variados y arduos»
- La directora del centro educativo admite que el instituto debió repasar los contenidos del anexo antes de publicarlos y niega cualquier tipo de sesgo intencionado
El IES de Salinas, un municipio de Asturias, presenta la religión como una asignatura «sencilla y divertida» y a su alternativa, Valores Éticos, como una materia mucho más complicada, que requiere «un esfuerzo considerable» y que consta de «temas dificultosos (…) variados y arduos». Así se desprende de un anexo del impreso de matrícula del centro (consúltalo aquí) que presenta las asignaturas opcionales de segundo de ESO. La información, según afirma el documento, es elaborada por los departamentos de las distintas disciplinas.
La directora del centro, Teresa González, explica que la intención del instituto era remarcar que Valores Éticos es evaluable y cuenta con una programación real a diferencia de otras alternativas a Religión que se han presentado en otros planes educativos. González explica que el IES Salinas no pretende presentar Religión como una asignatura fácil en contraposición a la dificultad de su contraparte laica, pero reconoce que los textos del anexo fueron aportados a la guía por los profesores y desde la dirección no se revisó su contenido, un repaso que a su juicio habría sido deseable. «La información no es adecuada», explica, pero insiste en que el centro no pretende implantar «ningún sesgo» en sus planes docentes.
Tanto la asignatura de Religión Católica como la de Valores Éticos son evaluables y cuentan para la media, según la última ley educativa –la LOMCE– que modificó las materias alternativas a la educación religiosa. Rajoy argumentó que la antigua Educación para la Ciudadanía se basaba en «un adoctrinamiento absurdo e inútil» para defender su sustitución por Valores Éticos, que plantea la desobediencia civil y la objeción de conciencia como ejemplos de incumplimiento de deberes y presenta a las Fuerzas Armadas como garantes de la «seguridad» y la «paz»: dos de los muchos aspectos que han sido criticados y tachados de ideológicos por sindicatos y asociaciones de padres y madres.
Cualquiera que haya trabajado en educación entiende, nada más ver el impreso, que la intención del instituto es marcar la diferencia entre la educación en valores y la MAE no evaluable, como ha dicho la dirección del centro. Tengan en cuenta que este curso todavía no se había implantado la LOMCE en segundo de la Eso, y por tanto podía haber todavía alumnos que cambiaran de elegir entre una asignatura «con nota» y una asignatura «sin nota» a elegir entre dos asignaturas sin nota.